Fernando Paillet



Fernando Basilio Paillet , nació en Esperanza, Santa Fe. Fue el primer hijo de Clotilde Insinger, hija y nieta de fundadores de la colonia, y de Isidore Philippe Paul Eugene Paillet, de Braives -Liege, Bélgica-, profesor de piano y canto.
En junio de 1894 comenzó a trabajar con F. Polzinetti en Esperanza. Luego en Sarmiento, pueblo vecino, y al año siguiente en el estudio de Francisco Oliveras, de Santa Fe.
Entre 1896 y 1901 trabajó en Rosario, con R. Brio; en Buenos Aires; en Mar del Plata, de nuevo en Santa Fe, con Lutser; en Esperanza durante casi dos años, probablemente ya en forma independiente -; y, por último, en La Plata, para la Casa Cappelli, como operador y retocador.
Volvió a Esperanza, instaló su estudio y trabajó allí durante cuarenta años. Fue pintor -en 1925 abrió una pequeña galería de arte que aparentemente cerró al poco tiempo -, violinista y director del coro de la Sociedad de Canto. Formó parte de un cuarteto de cámara. Compuso cuatro obras editadas -un tango, un vals y dos nocturnos- y una marcha inédita: "A Esperanza".
Escribió una comedia: "Bodas de Plata matrimoniales Paradiso - D' Angelo". Dejó algunos apuntes y el primer capítulo concluido de una autobiografía cuyo título seria "La hora cero", que nunca terminó.
En 1948 las autoridades municipales le encomendaron organizar el Museo de Bellas Artes de la ciudad. Aceptó y propuso, además un anexo: el Archivo Histórico, formado por pequeños cuadros con collages de fotos sobre instituciones, costumbres, familias fundadoras y lugares históricos de Esperanza. Con el trabajo concluido las autoridades descartaron el proyecto. Paillet devolvió las pinturas donadas para el Museo y destruyó la mayor parte de sus cuadros para el Archivo, trabajo al que consideraba la consumación de su obra como fotógrafo.
El capítulo concluido de su autobiografía se titula "Se funda una colonia". Está fechado en 1950 y es el comentario más mordaz que hemos leído sobre la vida de nuestros pueblos gringos, en la figura de Esperanza; ciudad venerada y desdeñada al mismo tiempo; tema principal del "portrait de hombres" más importante de la fotografía argentina conocida de principios de siglo y uno de los más notables de la fotografía latinoamericana difundida;
Allí también murió Paillet, muy pobre y físicamente disminuido. Encomendó su archivo a Rogelio Imhoff, que junto a otros familiares lo cuidó desde entonces con celo ejemplar.